Los seres humanos somos muy
distintos cada uno tiene unas ideas, pensamientos, maneras de ver y vivir la
vida disímiles, lo que lleva en muchas ocasiones a que se presenten discordias
o discusiones porque de cierta manera cada persona es un mundo que encierra una
gran variedad de posibilidades. Por eso se hace necesario que asumamos
actitudes de apertura al diálogo y de tolerancia para respetar las opiniones de
los demás y para encontrar, dentro de las diferencias, aquello nos une o es
común a los otros.
El hombre crece y se desarrolla en
sociedad por tanto no puede evitar el contacto con los demás, así que no
debemos tratar de solucionar los problemas que se nos presentan de manera
individual ya que todo se dificulta. Cuando trabajamos en equipo y aceptamos a
los demás con sus particularidades es mucho más fácil alcanzar las metas
propuestas.
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